La famosa lista y sus sorpresas

Ya se dio a conocer la lista de los convocados por Sven Goran Eriksson para el primer partido del Tri bajo las órdenes del sueco. No hubo sorpresas grandes, aunque si algunas muy gratas.

La primera es el retorno de Cuauhtémoc Blanco quien está en un gran momento, considerado uno de los mejores jugadores de la MLS, siendo líder de su equipo y que fue el jugador más valioso del Juego de Estrellas de la liga estadounidense.

Pude ver ese juego y me sorprendió la calidad de Blanco pues aunque lo fauleaban constantemente, nunca se quedó en el suelo, no reclamaba. Se levantaba inmediatamente y continuaba la carrera tras el balón, recuperando una y otra vez todas las pelotas perdidas. Anotó un golazo y dio pase para otro, sin duda uno de los partidos donde más he podido disfrutar de su futbol.

La otra sorpresa es que Nery Castillo no está en la lista. Pareciera obvio que no lo esté porque no ha tenido actividad como los otros mexicanos en el extranjero, pero en nuestro futbol nunca hay nada obvio. Esta vez no hubo consentidos.

Después del grave error de Nery de salir de Grecia donde había logrado consolidarse como un titular indiscutible y figura del equipo multicampeón de ese país; la vida de este jugador ha dado la vuelta y no ha podido regresar a su nivel pues no ha tenido actividad ni en Ucrania, ni en Inglaterra. Ahora busca opciones en España, pero si no encuentra algo donde puede mostrarse, la carrera de este jugador podría caerse y no dudaría que terminara adornando algún equipo del futbol mexicano.

Ya está la mejor generación de jugadores mexicanos de todos los tiempos, ya tienen un entrenador de primer nivel, uno de los mejores del mundo. Ahora solo deben lograr unir fuerzas para hacer de la Selección un equipo que sea protagonista en todos los torneos y campeonatos donde participe.

Esperemos que Blanco pueda seguir jugando como lo hace en Chicago y no como terminó por acostumbrarnos en México, y que Castillo retome el rumbo con un equipo donde tenga espacio para demostrar su calidad.

Por otro lado, veremos si los naturalizados pueden adaptarse al equipo nacional, a la presión, a las críticas, a las envidias y a una exigente afición. Ojalá el 20 de agosto podamos celebrar con el Tricolor una victoria clara sobre Honduras y que sea un agradable inicio de eliminatorias.